El pasado viernes 03/06/2011 me impactó la noticia de que un grupo de daneses liderado por el inventor Peter Madsen y el arquitecto Kristian Von Bengtson, había puesto en vuelo un cohete de construcción totalmente amateur denominado HEAT-1X. No deja de ser curioso que personas con unos recursos tan limitados hayan sido capaces de tal hito, aunque el cohete sólo alcanzara los 2 Km de altura en lugar de los 16 Km previstos.
La «empresa» que está detrás de esto es una sociedad sin ánimo de lucro denominada Copenhagen Suborbitals cuya filosofía es análoga a la del free software y cuyo proyecto es el de disponer, en un plazo de entre 4 y 10 años, de estos vehículos con capacidad para enviar a una persona al espacio.
Cuando uno escarba un poco en busca de más información, resulta que Peter Madsen ya ha hecho sus pinitos desarrollando unos submarinos de bolsillo -el Kraka y el UC3 Nautilus– de una complejidad técnica notoria para un amateur.
¿Puede que sea esta la era del Do It Yourself? ¿Es posible que organizaciones sin ánimo de lucro con presupuestos irrisorios acometan proyectos que uno asociaría a grandes agencias como la NASA o la ESA? ¿Podrían estos amateurs colocar a Dinamarca dentro del reducido club de países capaces de enviar personas al espacio?
La respuesta no es fácil pero tal vez este grupo de frikies hayan abierto una brecha particular en lo que se refiere a la técnica. Ellos consideran que el conocimiento es libre y debe estar disponible para que cualquier grupo de personas ambiciosas con el deseo de poner en práctica sus teorías, puedan materializarlas.
El Ciudadano Cableado 